El trato

«Cada cuento de La Antártica empieza aquí propone numerosas conexiones entre acontecimientos y personajes pero, al dejarlas siempre parcialmente en la sombra, logra que den una idea de enormidad, de gran resonancia y muchas implicaciones, aun para los sucesos más banales.» Jurado Premio Caza de Letras

La primera novela de Amado Nervo, El bachiller, representa el inicio de una fértil carrera literaria, mientras que en El donador de almas el lector se sorprenderá con un radical giro en su narrativa. "Debía dormir también allá en el fondo misterioso del biselado cristal, con un sueño levísimo de fantasma..." Amado Nervo, reconocido poeta, fue también diplomático, cronista y un extraordinario narrador. Aclamado por ser uno de los poetas modernistas mexicanos más importantes, su obra en prosa irradia la misma fuerza que sus poemas. Presentamos por primera vez en un solo volumen tres...

Durante la mayor parte de su historia, Uruguay ha ocultado la increible riqueza de su literatura oral tras la fachada de seriedad nacional, como si las magias fueran incompatibles con su lugar de nación culta. Y sin embargo, no existe uruguayo o uruguaya que no haya vibrado alguna vez con historias como éstas., en fogones o ruedas de mate, en encuentros con la abuela o el amigo entrañable, el chiquilín curioso o el bolichero sabio. Historias de un Uruguay diverso, urbano y rural, marinero y serrano, que muestra en sus historias mágicas lo más hermoso de sus valores, lo más terrible de...

El Londres literario, el Londres refugio e inspiración de tantos escritores, asoma a estas deliciosas páginas como una muestra de la escritura de Virginia Woolf en todas sus facetas: ficción, ensayo, artículos... La vida y la obra de Virginia Woolf siempre aparece impregnada de la vibrante atmósfera londinense. El bullicio de sus calles, el ruido del tráfico, la serena majestuosidad de sus edificios, sus tiendas y librerías, los personajes que, como ella misma, dibujan el alma literaria de una ciudad pueblan estos relatos. En estos textos, y también en sus Diarios, confiesa el placer...