Oliver Sacks fue un destacado neurólogo y escritor británico, conocido por sus obras que exploran la complejidad de la mente humana y las diversas condiciones neurológicas. Nació el 9 de julio de 1933 en Londres, Inglaterra, en una familia judía de origen litvano. Su madre, una médica y su padre, un médico de familia, fomentaron un ambiente intelectual y científico desde una edad temprana. A lo largo de su vida, Sacks se interesó por la intersección entre la medicina y la literatura, un enfoque que lo definiría como autor y profesional.
Oliver Sacks estudió en el Queen's College de la Universidad de Oxford, donde se graduó en 1956 en Ciencias Naturales. Posteriormente, se trasladó a los Estados Unidos para completar su formación médica en el Hospital de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA). Tras obtener su título de médico en 1960, Sacks comenzó a trabajar en el Hospital Estatal de Nueva York y se adentró en el fascinante mundo de los trastornos neurológicos.
Su carrera despegó en la década de 1970 con la publicación de su libro “Awakenings” (1990), que relata su experiencia tratando a pacientes que habían estado en estado de coma durante décadas debido a la encefalitis letárgica. Este relato se centró particularmente en la historia de un grupo de pacientes que, tras ser tratados con la droga L-DOPA, despertaron temporalmente de su letargo. La obra fue aclamada tanto en el ámbito médico como literario, y fue adaptada a una película protagonizada por Robin Williams y Robert De Niro.
- Entre sus otras obras más destacadas se encuentran:
- The Man Who Mistook His Wife for a Hat (1985): Un compendio de casos clínicos que exploran diversas condiciones neurológicas a través de narrativas fascinantes.
- Hallucinations (2012): Un estudio sobre el fenómeno de las alucinaciones y sus implicaciones neurológicas y psicológicas.
- On the Move: A Life (2015): Una autobiografía que ofrece una visión íntima de su vida, sus viajes y su trabajo.
El estilo de Sacks se caracteriza por su capacidad para contar historias, lo que lo convierte en un narrador excepcional. A través de sus escritos, no solo presenta datos clínicos, sino que también ofrece una profunda empatía hacia sus pacientes, mostrando el lado humano y emocional de las experiencias neurológicas. Su enfoque narrativo ha sido influyente en la manera en que se perciben y se relatan las historias de las personas con discapacidades y trastornos mentales.
A lo largo de su vida, Sacks recibió numerosos premios y honores por su trabajo, incluido el Premio Lewis Thomas en 1994 y el Premio GMC en 2008. También fue miembro de la Academia Americana de las Artes y las Letras y recibió el título de Doctor Honoris Causa en varias universidades.
Oliver Sacks también se caracterizó por su estilo de vida poco convencional. En su juventud, tuvo un interés por el culturismo y la motocicleta, lo que lo llevó a realizar viajes en solitario por los Estados Unidos. Su vida personal estuvo marcada por la búsqueda de la aventura y el conocimiento. En sus últimos años, Sacks enfrentó su propio diagnóstico de cáncer, lo que lo llevó a reflexionar sobre la mortalidad y la vida en sus escritos finales.
Falleció el 30 de agosto de 2015, en Nueva York, dejando un legado perdurable en el mundo de la neurología y la literatura. Su capacidad para conectar el arte de contar historias con la ciencia ha influenciado a generaciones de médicos, escritores y lectores, y su obra sigue siendo un referente en la comprensión de la mente humana.
Con su enfoque único y su profundo respeto por la experiencia humana, Oliver Sacks continúa siendo una figura influyente y su trabajo sigue resonando en la intersección de la ciencia y la literatura.