Croacia 8_8. Dubrovnik y sur de Dalmacia

La fantasía mediterránea de vivir días cálidos junto a aguas color zafiro a la sombra de antiguas ciudades amuralladas se hace realidad en Croacia. A su extraordinaria costa, cuajada de islas, y su interior con paisajes de picos escarpados, cascadas y lagos de gran belleza, se añade la deslumbrante Dubrovnik, una de las joyas del Adriático, con sus murallas y torres, sus monasterios medievales y sus iglesias barrocas, una muestra de la riqueza histórica y artística del país.

Ya sea visitando la casa de Santa Claus en Laponia, observando pingüinos en la Patagonia o visitando templos en Laos, este libro hace que el viajar en familia sea mucho más sencillo. Con numerosas ideas y consejos sobre los aspectos más variados de los viajes con pequeños aventureros, Viajar con niños ofrece a los padres una herramienta útil para planificar viajes en más de 80 países de todo el mundo.

Huellas, historias de animales que han transformado vidas es un compendio de narraciones sobre el amor y el respeto a los seres vivos que nos rodean, realizadas por los propietarios, rescatistas y asociaciones civiles de apoyo a los animales; todas, con un importante mensaje sobre el afecto, la protección y desde luego, la adopción responsable y comprometida.

Mallorca, reconocida estrella del Mediterráneo, destaca por su personalidad soleada, sus deslumbrantes playas, su mar azul, sus montañas remotas y sus conmovedores pueblos en las colinas. Y Lonely Planet te acerca a ella con increíbles propuestas para vivir experiencias únicas y los mejores consejos para planificar unas vacaciones inolvidables. Esta guía a todo color será tu compañera con sus consejos actualizados sobre qué ver y qué obviar y, sobre todo, para descubrir joyas ocultas que nunca antes hubieras imaginado. Déjate llevar por la Artà medieval, explora la impresionante...

Esta completa guía cubre de forma exhaustiva y amena las dos repúblicas de Europa central. Con ella, el viajero podrá descubrir desde lo más representativo de ambos países hasta aquello de lo que nunca antes había tenido noticia: pasear por el mítico puente de Carlos de Praga para zambullirse en el gentío, experimentar la remota vida de montaña en el magníficamente preservado pueblo de Vlkolínec, de 35 habitantes y Patrimonio Mundial por la Unesco; trasladarse al Renacimiento entre sorbo y sorbo de vino moravo en uno de los cafés de la plaza principal de Tel ; sumergirse desnudo...