El robo de la máscara

Descripción del libro: En un thriller de ritmo rápido, Chandler Scott continúa su búsqueda de la historia de los sueños. ¿Cuánto le costará? ¿Su carrera, su amor, su vida? Continuando con sus peligrosas investigaciones, descubre tramas más siniestras de las que incluso él podría imaginar. A medida que se sumerge en el mundo de los secesionistas y el gobierno se vuelve loco, pronto se da cuenta de que su vida pende de un hilo. Debe decidir en quién puede confiar: su compañero documental con un pasado oscuro o las personas que acaba de conocer con sus propias agendas. Rebellium,...

Para Yancie, el trabajo que había conseguido como chófer del empresario Thomson Wakefield era todo un reto. Desde que lo había conocido, su vida había ido de contratiempo en contratiempo, pero sabía que era un hombre del que podía enamorarse. Para ella, el amor significaba matrimonio. ¿Significaría lo mismo para Thomson? No lo sabría hasta que unas placas de hielo en la carretera les hicieron sufrir un terrible accidente y él le hizo la pregunta en la cama de un hospital. ¿Podía confiar en las palabras de un hombre que estaba bajo los efectos de los calmantes?

Para todos los que la conocen, Angelica Lariviere vive en un mundo perfecto. Tiene un matrimonio ideal, dos hijos pequeños, y un encantador círculo de amistades. Pero Angelica es, también, una mujer que ha olvidado su propia belleza y su capacidad de seducción. Y su marido, un banquero francés, se muestra cada vez más distante y distraído. Hasta que un encuentro casual con, Jack, un seductor sudafricano hace tambalear todas sus convicciones. Por primera vez en muchos años, Angelica se siente deseada, y lo que empieza como una relación puramente epistolar se convierte en algo cada vez ...

Mi nombre es Julián Romero de Ibarrola y soy maestre de campo de los tercios del rey nuestro señor. Sirvo hoy con don Felipe II como ayer serví con su augusto padre, el césar Carlos. Queréis que os cuente mi historia y yo os diré que mi único mérito es haber salvado la piel donde otros dieron la vida. Constato en vuestras miradas que no sabéis lo que pasó en San Quintín. Avergonzaos, ganapanes, porque pocas páginas han escrito nuestras armas más gloriosas que aquella victoria, en la que este vuestro servidor cayó herido cuando una bala de mosquete me perforó una pierna y desde...