Los Distintos Colores del Tiempo

Mi nombre es Rebeca Galvez, y deseo compartir contigo un poco de lo que se trata este libro, y antes que nada le doy las gracias a Dios, por haberme dado la oportunidad, de escribir este libro, donde juntos caminamos de la mano, l y yo. Donde lloramos juntos! Remos juntos! Escribir este libro titulado Inquebrantable, no ha hecho fcil pero como dije, tomada de la mano de Dios, lo logr! Y aqu, se los presento a ti y al mundo entero, ya que mi mayor deseo es predicar su palabra en todo el mundo y al mismo tiempo hablarte y ensearte del amor de Dios, que es tan grande e infinito y no tiene fin....

Cómo cambiar el mundo a través de la oración de intercesión Como regla general, subestimamos el poder de nuestras oraciones por los demás. Intercesión tiene ramificaciones contemporáneas, generacionales y eternas. La anatomía de la intercesión mostrará la vida de grandes intercesores, desde Abraham y Moisés hasta David "Praying" Hyde, Howells Rees, y John G. Lake. Desde sus puntos de vistas veremos enseñanzas y principios sobre la importancia y el impacto de la oración de intercesión desde una perspectiva práctica. Jesús vivió para inteceder por nosotros (Hebreo 7:25). Es el...

Babalúaiyé (Padre poderoso del mundo) es la forma en que se le ha llamado en Cuba a una de las divinidades más interesantes del África subsahariana, pero no es su único nombre, porque también se le conoce como Asoyín, Asojuano, Shapkuana, Alifreté, Afimayé, Sokuta, Lokuón, Dokunambó y otros muchos. Sin embargo, basta decir San Lázaro, para que, tanto en Cuba como en otros países del Caribe y América Latina, se reconozca de quién se está hablando, porque Babalú es punto de convergencia de creencias africanas y europeas. ste texto nos atrapa desde sus primeras líneas, para...

El Dr. Brian Bailey nos presenta este comentario de la epístola a los Efesios, la cual bellamente nos presenta a Cristo como el Rey guerrero vestido de la armadura de Dios. Esta misma armadura está disponible para nosotros por Su gracia para que podamos también nosotros ser victoriosos sobre el enemigo. Es la oración del autor que los lectores puedan adentrarse en estas verdades preciosas para que podamos ser resucitados y hacernos “sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús.” (2:6)